Gaviota Cangrejera: una especie criterio para la KBA Bahía Blanca, Bahía Falsa y Bahía Verde

En el extremo sur de la provincia de Buenos Aires, se encuentra un tesoro natural de inestimable valor: Bahía Blanca, Bahía Falsa y Bahía Verde. Este intrincado laberinto de islas, bancos de arena y bañados alberga una biodiversidad única, donde se destaca la presencia de la Gaviota Cangrejera, un ave endémica de las playas de Buenos Aires y el norte de la Patagonia. Su época de cría comienza en septiembre, donde pone de dos a tres huevos; ambos padres alimentan a sus pichones con cangrejos.

El área propuesta es el hogar de una gran variedad de especies, desde aves migratorias hasta mamíferos marinos. La Gaviota Cangrejera, con el 79% de su población mundial anidando en esta zona, es el claro ejemplo de la importancia de este ecosistema.

A pesar de su belleza y riqueza natural, este sitio enfrenta serias amenazas, como la contaminación, la urbanización, la actividad pesquera y el turismo no responsable. El dragado regular del Canal Principal de Navegación representa un disturbio en las colonias de nidificación de la Gaviota Cangrejera. 

Las aguas del estuario son el hábitat de toninas, franciscanas, tortugas marinas verdes, cabezona y laúd, lobos marinos de un pelo y de dos pelos. Además, entre la fauna terrestre se destacan guanacos, peludos, pumas, gatos monteses y de pajonal. Dentro del área se han registrado especies amenazadas como el Burrito Negruzco y el Cardenal Amarillo y en áreas rurales periféricas a la reserva se observan bandadas de la Loica Pampeana.

El sitio ha sido confirmado como IBA (Área Importante para la Conservación de las Aves) y más de la mitad de su superficie se encuentra protegida.